...intentando seguir creyendo en las hadas...

domingo

Manifiesto de las despedidas

Madrid, febrero de 2010

La gente siempre termina por irse.
Da igual lo importante que haya sido una persona para ti, da lo mismo lo que hayais vivido, lo que haya significado , el tiempo que hayáis pasado juntos o lo que te haya marcado; en el amor y la amistad PEOPLE ALWAYS LEAVE.

Es indiferente el hecho de que sea por decisión propia o ajena, por un malentendido o por malas intenciones, por cansancio y desgaste o por un desengaño.
No importa si es una ruptura rápida y decisiva o un proceso de distanciamiento; todos terminan siempre por desaparecer.

Personas que han formado parte de tu vida, que lo han significado todo, por quienes te has levantado alguna mañana de esas en las que todo es negro, personas sin las que pensabas que tu mundo carecería de sentido, personas en las que crees haber repercutido…
...personas que de pronto son eliminadas, no significan nada o lo significan todo sin quererlo.

Siempre hay un momento  decisivo.
Aunque se trate de un distanciamiento producido poco a poco, llega un instante en el que se produce la ruptura, el momento del adiós, de la despedida, de la decepción, de la absoluta indiferencia hacia una persona o el de la obligación impuesta por uno mismo a olvidar.

¿Hasta qué punto el sufrimiento de esa pérdida compensa una felicidad pasada?

Estoy harta.
Estoy harta y tengo miedo  de que la gente entre y salga de mi vida porque no soy un pasillo , ni una galería, ni una sala de espera donde pasar un tiempo, donde es indiferente el si te quedas o te vas.

Tengo pánico al amor, porque el amor se acaba, el amor termina por desaparecer o extinguirse, pero, con demasiada frecuencia solo para uno de los afectados.
Uno se va, pero el otro se queda.
Se queda con los recuerdos, se queda con las dudas, con el porqué se acabó, con el qué hice mal o qué dejé de hacer…

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